El lifting facial de plano profundo es un procedimiento quirúrgico que se realiza en tejidos más profundos en comparación con los métodos tradicionales de lifting facial. Esta técnica rejuvenece el rostro sin crear una apariencia artificial y proporciona resultados más duraderos que otros métodos de lifting. Rejuvenece no solo áreas específicas, sino todo el rostro, mejorando la elasticidad de la piel y logrando una apariencia más juvenil.
Durante la cirugía, se realiza una línea de incisión que comienza frente a la oreja, sigue alrededor de la oreja y se integra en la línea del cabello. Los tejidos faciales más profundos (capa SMAS) se elevan hacia arriba y se reposicionan. Esto elimina la flacidez y resulta en un aspecto más joven. Después de tensar los tejidos profundos, se elimina el exceso de piel y se estira la piel restante para remodelar los contornos faciales. Al igual que en la cirugía corporal, en los lifting faciales también se utilizan técnicas quirúrgicas laparoscópicas con incisiones más pequeñas y métodos menos invasivos.
Después de la cirugía, pueden aparecer hinchazón y hematomas en el área facial. Esto generalmente desaparece en unas semanas. Los puntos de sutura colocados durante la cirugía generalmente se retiran dentro de los 7-10 días. La mayoría de los pacientes pueden regresar a sus actividades sociales aproximadamente 2 semanas después de la cirugía.
